Acerca de Tzvi
La lengua que hablamos condiciona e influye nuestras acciones y pensamientos. Para comprender las acciones y pensamientos de los personajes de la historia bíblica debemos estudiar la lengua que ellos hablaban.
Shalom, my nombre es Tzvi. Estuve enseñando hebreo bíblico por casi 10 años. Comencé enseñando en línea a un grupo de personas de todo el mundo que tenían el deseo de aprender la langua de la Biblia y continué desarrollando y perfeccionando el sistema hasta desarrollar el curso completo que pueden encontrar en esta página.
Nací y me crié en Argentina (por eso es que hablo el español), en donde asistí a una escuela judía y aprendí a leer y escribir hebreo desde la niñez.
En el 2005 viajé a Israel por primera vez y luego de una experiencia que me cambió la vida decidí radicarme allí, en donde viví hasta fines del 2014, cuando por motivos familiares, me radiqué en los Estados Unidos, en donde resido hasta hoy.
Cuando llegué a Israel no tenía la capacidad de hablar el hebreo, pero a los pocos meses lo estaba hablando de manera fluida y hasta pude conseguir un trabajo hablando la lengua. Al poco tiempo, algo dentro mío me llevó a conseguir una Biblia hebrea (llamada Tanaj) y comenzar a leerla. A pesar de tener la comprensión de un novato (podía comprender hasta un 20 o 30% de lo que leía), tuve el sentimiento interno de que algo en mi alma se estaba moviendo. Las letras de las palabras hebreas sobresalían de la página al mismo tiempo que yo sentía que una semilla en mi interior estaba germinando.
A pesar de tener la comprensión de un novato (podía comprender hasta un 20 o 30% de lo que leía), tuve el sentimiento interno de que algo en mi alma se estaba moviendo. Las letras de las palabras hebreas sobresalían de la página al mismo tiempo que yo sentía que una semilla en mi interior estaba germinando.
En mi tiempo en Israel conocí miles de personas de todos los países y todas las lenguas imaginables, y todos tenían un mismo deseo; comprender la palabra de la Biblia.
No me tomó mucho tiempo darme cuenta de que el conocimiento que yo poseía no era sólo para mí, sino para compartir con otros. Es así que comencé a realizar estudios e invitar a otras personas, luego clases en línea, y luego el sitio web del Instituto de Hebreo Bíblico que aquí ven
Si es también tu deseo aprender más en profundidad la lengua de la Biblia, para comprender el contexto histórico y cultural en el que fue escrita, te invito a que te sumes a mis estudiantes.
¡Shalom!
